PIERDEN LOS QUE SE RINDEN
-¿Qué pasa Yuslier, no te parece que pierdes el tiempo, no estás corriendo riesgos, para qué sigues enfrascado en tu blog? Perdóname pero eres un iluso-
Preguntas y frases como esas suelen salir de la boca de algunos, que ejercitan el intelecto, personas a las cuales considero inteligentes, pero a quienes la insensibilidad y la indeferencia les han invadido el alma. Su escapatoria la tienen clara: largarse lo más lejos posible de la patria; incluso en más de una ocasión se avergüenzan de ser cubanos.
Lo siento pero les tengo una mala noticia: sí, soy un obstinado soñador, un irremediable adicto a la libertad de nuestra patria, un apasionado por la democracia. Existo completamente convencido: quién único pierde es aquel que se rinde. Estoy absolutamente seguro que los cubanos, en paz, podremos cambiar a Cuba. Las pruebas están principalmente desde la segunda mitad del siglo XX en adelante. La propia Ucrania es el más reciente ejemplo de que sí se puede alcanzar la libertad mediante la no violencia.
Todos pueden dar por hecho qué jamás me verán sucumbiendo a la desesperanza, la indiferencia, individualismo dañino, frustración perenne. Creo en todo lo que digo y tengo profunda fe en la dignidad del pueblo cubano. Es más, esos criterios vertidos por individuos aplastados por la desilusión para mi resultan ser otro motivo que me invita a seguir soñando para que también ellos puedan liberarse de ese mal que es la apatía y la frustración.
Sin embargo, agradezco también a los que expresan su admiración, transmiten aliento y apoyo, cada una de sus expresiones me reconforta el alma. No tengo la menor duda: todo lo que hoy es realidad comenzó siendo un sueño. Afortunadamente los cubanos que soñamos somos más, que aquellos bloqueados por el miedo y la desilusión.
Yuslier el Saludeño 